Deja tus comentarios Pan y masas, Salado
Dificultad:
- Leche:
- Harina todo uso:
- Aceite de oliva suave:
- Sal:
A veces la besamel es un martirio para algunas personas, pero siguiendo unos sencillos pasos veréis que siempre os saldrá bien y sobre todo sin los fastidiosos grumos.
Pasos para preparar la besamel:
No os pongo cantidades porque va a depender de para qué queramos la besamel, por eso en cada preparación se va a necesitar una cantidad u otra, por ejemplo, para salsear tendrá que estar mas ligera, que para hacer unas croquetas.
Esta receta es para aprender a prepararla sin esos temidos grumos, y siguiendo estos pasos, os saldrá siempre estupenda.
Un paso esencial que siempre tendréis que hacer es echar la misma cantidad de grasa, ya sea aceite o mantequilla que de harina, es una regla básica para que salga sin grumos.
- Echar en una cacerola el aceite de oliva suave, o si preferís, de girasol o mantequilla, en esta preparación no utilizo aceite de oliva virgen extra porque me gusta que la besamel tenga un sabor suave.
- Cuando esté caliente echar la harina, con el fuego a la mitad y sin parar de mover con varillas, dejar que se cocine unos 2/3 minutos.
- Cuando se haya cocinado la harina, ir incorporando la leche poco a poco y sin dejar de mover, mejor con varilla.
Al principio parecerá que no nos va a salir, pero no os preocupéis, seguir mezclando y veréis que funciona, os quedará una besamel lisa y sin grumos.
- Añadir la sal con cuidado, a lo largo de la preparación.
- Cuando esté bien integrada toda la leche, hay que dejar cocinar a fuego mínimo y moviendo de vez en cuando unos 10 minutos, para que salga más cremosa y todavía ¡más rica!